jueves, 25 de diciembre de 2014

Tratamientos naturales de urgencias



 La palabra Naturopatía, es decir, la enfermedad tratada o considerada a través de la   Naturopatía. Sin embargo es una definición que no está completa, que no nos define la esencia real y concreta de este arte.
 La Naturopatía es un sistema higiénico de enseñanza y terapia, que informa al hombre y a la sociedad  cómo conservar la salud o como recuperarla, si se ha perdido,a través de remedios no agresivos dentro de un orden y control natural.
Queda pues, claro, que la Naturopatía no es solo usar remedios naturales para combatir la enfermedad.
La Naturopatía es una ciencia higiénico-terapéutica que unifica al ser humano en su parte física, psíquica y espiritual. Es una escuela de la Medicina Natural que posee su propia historia legal, pues fue creada en Nueva York, por el Dr. Just en 1896 e incorporada a las leyes de Washington en el año 1919.
La Naturopatía también como escuela terapéutica tiene sus propias técnicas de “urgencias”.
No voy a excluir los avances médicos quirúrgicos de la medicina convencional. No obstante, hay zonas rurales en donde los centros hospitalarios más próximos están a cientos de kilómetros. En las grandes ciudades, el tráfico intenso y colapsado puede retrasarse considerablemente (con el peligro que ello supone) la llegada de una ambulancia para auxiliar a un enfermo grave.
 La hidroterapia, la fitoterapia (hierbas medicinales), la arcilla, la dieta sana, el sol, el aire, y un largo etcétera, son una pequeña muestra de las posibilidades que la Naturopatía tiene a su alcance para ofrecer una alternativa válida y eficaz. Pues lo único que importa es la salud para el bien de la humanidad, donde todas las escuelas médicas deberían ofrecer una fraternal y humana colaboración sin buscar intereses personales, solo un futuro con menos enfermedad y sufrimiento.


Tratamiento nº 1

Indicado para:
 º   Envenenamientos, intoxicaciones,picaduras de insectos venenosos,mordedura de serpientes, mordeduras de animales, indicios de gangrena en un miembro, tetános.

Ayuno

El enfermo no debe comer absolutamente nada. Se administrará como única bebida el siguiente preparado: Mezclar el zumo de tres limones frescos y recién exprimidos con tres dientes de ajos, que previa mente han sido chafados en un mortero. Se le hará tomar esta bebida al accidentado cada nedia hora. Si al cabo de seis horas el emfermo ha recuperado un poco, tomará la misma cantidad, pero esta vez con una frecuencia de una hora.
Al segundo día se le dará la bebida cada cuatro horas.
Al tercer día de tratamiento beberá limones solos, recién exprimidos, cada cuatro horas, e intercalando zumo de naranja o de pomelo. Al cuarto día se seguirá igual. A partir del quinto día, si ha desaparecido el peligro, se le darán al enfermo dos comidas de frutas frescas del tiempo (mañana y tarde), una sola variedad de fruta por comida, exceptuando plátanos y cocos. Las más indicadas son: naranjas, manzanas, úvas, peras,melocotones,cerezas,nísperos o kiwis. El sexto día se le dará un desayuno a base de frutas (una sola variedad por desayuno),y en la comida del medio día, tomará una ensalada fresca de lechuga, cebolla cortada a rodajas finas, ajo picadito muy fino y remolacha roja, enderezada con unas gotas de zumo de limón y una cucharadita de aceite de germen de trigo. Se puede tomar con un plato de acelgas al vapor con una pizca de sal marina. Por la noche, en la cena, a partir del séptimo día se le instaurará la dieta "hipotoxica". La pérdida de peso que se  experimentará en el paciente, así como cierta debilidad o aparición de diarrea fétida, no deberá alarmar a nadie, pues el organismo utiliza sus propias defensas en un proceso de eliminación de sustancias internas denominado "histólisis". Recuerde el lector que hay quien voluntariamente, através de las denominadas "huelgas de hambre", han estado hasta cinco semanas sin ingerir otra cosa que agua.
  Estos tratamientos de urgencias deben ser supervisados por un profesional sanitario.
  La medicina natural no pretende ser una ciencia absoluta, pues todas las personas no están preparadas ni deben seguir un tratamiento sino conocen o tiene una formación que les permita realizarlo sin peligro.















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